(no) la necesitaba,
(pero) la encontré:
una garantía,
una debilidad oculta:
todo silencio que hiera,
o haya herido
con palabras violentas,
sólo emula
el corte de la espada
en la piel del lago
ahora sé que toda mi escritura
será perdonada
17 nov 2010
9 nov 2010
coherencias
I
no niego del todo tu versión,
pero ya tenías noticias de que soy un terrible masoco
ambos lo sabemos:
nadie quiere salvar al Otro,
pero es que no necesito ayuda
y vos…
no sé, decime
II
pocos admiten que la diferencia entre
historia e histeria
sea más que una letra pedorra
(que me perdone la o)
III
no me costaría nada mandarte a cagar
(¡hace mucho tiempo que no te necesito para estar hasta las manos con vos!)
pero no quiero
no niego del todo tu versión,
pero ya tenías noticias de que soy un terrible masoco
ambos lo sabemos:
nadie quiere salvar al Otro,
pero es que no necesito ayuda
y vos…
no sé, decime
II
pocos admiten que la diferencia entre
historia e histeria
sea más que una letra pedorra
(que me perdone la o)
III
no me costaría nada mandarte a cagar
(¡hace mucho tiempo que no te necesito para estar hasta las manos con vos!)
pero no quiero
5 nov 2010
yo podía tocarme la frente con los pies, ahora no sé
de nuevo “de nuevo”
todo el tiempo el tiempo
otra vez es(t)e cuerpo de interruptores fallidos
(que no interrumpen nada, por si todavía no lo sabías)
insistí: ¿qué querías decirme vos?
(me señalé otro)
no, perdón…
usted, el de mi cuerpo…
todo el tiempo el tiempo
otra vez es(t)e cuerpo de interruptores fallidos
(que no interrumpen nada, por si todavía no lo sabías)
insistí: ¿qué querías decirme vos?
(me señalé otro)
no, perdón…
usted, el de mi cuerpo…
1 nov 2010
dimanche au cinéma
de tanto jugar con cosas hermosísimas,
cosas tan enamoradas y un poquito deliciosamente perversas,
hasta me siento hermoseado y dulcemente desviado,
perdidamente encontrado
pero más al fondo
(abajo de la piel arañada y la carne en llamas)
es puro dolor en la panza:
entre las tripas bien revueltas, viscosas y sangrantes,
y más abajo…
y más arriba, bien arribísima…
puro vértigo
vértigo… y frustración, y dolor,
todo amor intrascendente,
insultantemente asimétrico
¡qué mierda!
¡qué envidia!
¡qué belleza, por favor!
cosas tan enamoradas y un poquito deliciosamente perversas,
hasta me siento hermoseado y dulcemente desviado,
perdidamente encontrado
pero más al fondo
(abajo de la piel arañada y la carne en llamas)
es puro dolor en la panza:
entre las tripas bien revueltas, viscosas y sangrantes,
y más abajo…
y más arriba, bien arribísima…
puro vértigo
vértigo… y frustración, y dolor,
todo amor intrascendente,
insultantemente asimétrico
¡qué mierda!
¡qué envidia!
¡qué belleza, por favor!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)